¿Qué un país, a través de su gobierno, tenga
el poder ‘legal’ sobre las decisiones fundamentales de otro pueblo e imponga
sus criterios sobre el mismo y sus pobladores? Está mal, como lo está que ese otro país sea el
dueño de nuestra Tierra.
No es posible aprender libertad estando
sujetos a control gubernamental de otro país.
No es posible hablar de democracia sometidos
a una junta creada por el congreso federal y estar sujetos a sus cortes, que son
las que disponen lo que está bien o mal para los puertorriqueños. No existe verdadera libertad cuando hay tal
dominación e imposición de criterios culturales y legales que reflejen la idiosincrasia
del otro país.
Tal estado de cosas es abusivo, ofensivo e
injusto. Violenta el derecho a la
igualdad entre los seres humanos. Igualdad
no es ser iguales a quienes nos oprimen; significa poseer los derechos y
prerrogativas para decidir, por y para nosotros. Sostener que igualdad significa ser parte del
país opresor es una tergiversación y una mofa.
Puertorriqueño, aprendamos la libertad.
Tienes toda la razón.
ResponderBorrarMuy Buena presentación!!!
¡Albricias, encuentro alguien que piensa como yo en mi entorno!
ResponderBorrarTe felicito, amigo mio....voy a tratar de enviarlo a mis amigos
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